jueves, 26 de febrero de 2015

DESDE MI CALLE


PODEMOS Y CIUTADANS DESATAN EL PANICO


Una vez acabado el debate sobre el estado de la nación, mítines en el Congreso de dos partidos que luchan por salvar el insalvable bipartidismo, y lejos todavía de las elecciones de mayo, que serán más fáciles para el PP, porque las generales serán ya otra historia, Rajoy y los suyos demuestran cada vez más miedo escénico, casi pánico a juzgar por lo que dicen y hacen, de quienes, según todas las encuestas, les pueden arrebatar el poder: Podemos, y por si fuera poco: Ciudadanos, ahora ambos sin representación en la cámara pero a cuyos líderes son a quienes se hubiera querido escuchar. 

O sea, una izquierda populista y radical. Un centro catalán, extendido a toda España. Así que sin abandonar su feroz campaña contra la formación de Pablo Iglesias, PP y PSOE han empezado otra más "ligth" de descrédito contra las huestes de Albert Rivera. Desde el poder se tienen muchas herramientas a mano para buscar el lado oscuro de las cosas y sobre todo de las personas. 

Se burlan de ese catalanismo centrista algunos burdos dirigentes populares. Olvidan que la torpe gestión política de Rajoy ha dado alas al independentismo, que tiene elecciones convocadas para septiembre que pueden ser la tumba del PP, porque aunque legalmente no pueden ser plebiscitarias, en realidad lo serán, como el pasado referendo ilegal resultó en verdad una consulta al pueblo, gracias a la pasividad pusilánime del Gobierno que se quitó el mochuelo de encima recurriendo a la justicia. Lo que ocurra en estos comicios catalanes será decisivo para todos, pero muy especialmente para Rajoy. Y todo ello puede redundar, muy pocos meses después, de manera clara en beneficio de Ciudadanos. 

Saben lo que van a tener que soportar, lo mismo que lo sabe Podemos. Por el contrario, ni los de Rivera ni los de Iglesias, necesitan hacer campaña alguna contra el PP y el PSOE, que ya se encarga de hacerla, y de qué modo, la realidad de cada día. Los políticos imputados por corrupción, las cuentas de Bárcenas, los ERE de Andalucía, el caso Gürtell, las tarjetas de Bankia, la lista Falciani. No se necesita más para erradicar un bipartidismo que lucha con uñas y dientes por sobrevivir y disfrutar de la mamandurria, aunque el sistema ya haya sido condenado por la sociedad. Incluso por quienes, aun tapándose la nariz para evitar el hedor, votarán de nuevo por los de siempre. 

Que la campaña contra Ciudadanos va a ser menor, con toda seguridad, que la que sufre Podemos se explica en que al final el PP puede que necesite los escaños de Rivera para seguir en La Moncloa, lo que es posible, aunque los del centro no suelten prenda al respecto. Aunque lo que más ambiciona ahora mismo Rajoy es pactar luego con el PSOE y lograr una mayoría absoluta si no del PP sí del bipartidismo. También es posible. O eso, un Gobierno solitario y en minoría de duración efímera y nuevas elecciones. A no ser que se imponga la pinza de la izquierda.

DESDE MI CALLE, que sigue ssiendo la calle de todos

3 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  2. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  3. Amigo Miguel Ángel, cada día que pasa, más se acerca el final del bipartidismo.
    Estoy convencido del cambio político que se avecina, es imparable y tanto el PPopular como el PSOE, lo saben, creo que trataran de unir fuerzas para combatir a PODEMOS; será un tremendo error de los socialistas que, tanto los militantes como simpatizantes, no les van a perdonar.

    Estoy esperanzado. Se puede decir que vienen nuevos aires democráticos y esto hará fácil el cambio que todos esperamos. Será fácil, poque este cambio lo quiere y lo desea gran parte del conjunto de la sociedad española.

    Recibe un fuerte abrazo.

    ResponderEliminar